Para los
que no sepan, el 15 de Septiembre marca el inicio del Hispanic American Heritage
Month. Este mes tiene como objetivo “celebrar la historia, cultura y
contribuciones de ciudadanos Americanos cuyos ancestros vinieron de España,
México, el Caribe y América del Sur.” Además, este tipo de celebraciones tienen
la doble ventaja de que demuestran categóricamente que el racismo en Estados Unidos
ya no existe, porque nada dice “ya no somos racistas” como elegir a un grupo de
personas basado únicamente en su raza y darles tratamiento completamente diferente
de los demás.
Y ustedes se preguntarán ¿bueno, pero eso cómo se celebra? Pues de muchas maneras. Una por ejemplo es que agarras a un grupo de gente chaparrita, gordita y morena, los vistes de zarape y sombrero y los metes en un estudio de televisión, invitas a un grupo de celebridades de descendencia hispana (estás buscando jugadores de futbol – no confundirlo con football –, boxeadores y beisbolistas, porque los latinos sólo son buenos para eso) y a una güera que haga cara de fascinación con cualquier historia taruga que le cuenten para que los “entreviste”. Después del programa todos nos vamos a tomar unos tequilas servidos en un sombrero mientras tocan mariachis.
Otra que también
me gusta es cuando las compañías hacen una versión latina del producto que están
vendiendo, por ejemplo, cambiamos Sports Nation por Sports Nación y ya está
mexicanizado o agregamos un pronombre a los uniformes de basketball para que digan “Los Spurs”.
Lo único
que me da tristeza es que los posters que tenemos están medio feitos, porque los hispanos todavía no inventamos Fotoshop.